Algo bueno tiene el anarquismo: y es que si no te gusta la manera en la que se organiza uno, te gustará la manera en la que se organiza otro. Hoy en día, existen muchas escuelas -o para que me entiendas, sub-ideologías- dentro del anarquismo, todas estas con diferentes puntos de vista pero con una cosa en común: el antiautoritarismo.
Escuelas del anarquismo
Anarquismo Individualista
El anarquismo individualista se caracteriza por la priorización del individuo sobre el resto, oponiéndose, claramente, a la colectivización de la economía (pero no significando que aboga por el capitalismo). Un anarquista individualista le da prioridad al individuo no solo sobre la economía, sino también sobre la moral, costumbres y tradiciones, religiones y básicamente, cualquier cosa. Los anarquistas individualistas no creen que una revolución sea la manera correcta de llegar a una anarquía, sino que creen en la esperanza de que la sociedad progrese y acepte la anarquía.
Sin embargo, el anarquismo individualista no debe confundirse con el egoísmo, teorizado principalmente por Max Stirner, el cual decía que el individuo debe ser totalmente libre de hacer lo que quieran sin hacer caso a las religiones, la moral o en general, lo que dicen, sienten y piensan los demás (y esto no significa que sean monstruos sin corazón, solo individuos libres que no sienten que la moral, al menos externa al individuo, sea necesaria y buena). Se podría decir, muy básica y erróneamente, que el anarquismo individualista es simplemente individualista, mientras que el egoísmo de Stirner es un individualismo anarquista mucho más radical e incluso nihilista.
Mutualismo
El mutualismo fue la primera escuela anarquista teorizada, la cual vino de la mano del anarquismo. Es decir, cuando se teorizó el anarquismo por Proudhon, las bases del anarquismo eran simplemente mutualistas. No fue, obviamente, hasta que vinieron otros filósofos políticos a contribuir al anarquismo, principalmente cercanos al socialismo-colectivismo, como Bakunin y Kropotkin, que el anarquismo empezó a ser más popular entre el anarquismo colectivista/comunista que no en el mutualista, aunque hoy en día hay significantes números de personas que creen en el mutualismo (y algunos incluso contribuyeron al mutualismo dejando de lado muchas propuestas de Proudhon).
El mutualismo, al menos de Proudhon, aboga por una sociedad donde los medios están poseídos tanto individualmente como colectivamente. La razón por la cual el anarquismo fue teorizado como mutualista al principio, es porque éste se veía como una ideología que juntaba lo que proporcionaba tanto el comunismo como el capitalismo. El capitalismo aportaba libertad pero no igualdad, y el comunismo aportaba igualdad pero no libertad. Entonces Proudhon teorizó el anarquismo como mutualista insinuando que para llegar a la libertad y la igualdad, se debían mezclar ambas ideologías en una. Proudhon señalaba que la propiedad era un robo (de ahí viene la frase «Property Is Theft» en inglés) y que la posesión era un uso legítimo e insinuaba que tanto el colectivismo/comunismo como el capitalismo abusaba de la propiedad, por lo que se oponía a ambos.
El mutualismo rechaza el provecho y la renta, ya que piensan que es la forma de llegar a la igualdad. La economía mutualista consiste en un libre intercambio, llevadas a cabo entre trabajadores autónomos o empresas grandes controladas por los trabajadores. El mutualismo es una escuela anarquista muy amplia (e incluso puede ser algo complicado de entender y aplicar).
Anarquismo colectivista o comunista
El anarquismo colectivista o comunista aboga por una sociedad anarquista donde la propiedad, las herramientas de trabajo y básicamente, lo que hoy en día es propiedad de ricos y propiedades hechas para enriquecer, pasan a ser propiedad colectiva/de los trabajadores. Las ganancias se distribuirían colectivamente en función del trabajo realizado. Es entonces cuando aparece Bakunin y destroza el colectivismo, reemplazando éste por el anarquismo comunista (o comunismo libertario). Ahora las ganancias no se distribuirían en función del trabajo realizado, sino según lo que el trabajador en cuestión necesite.
Anarcosindicalismo o anarquismo sindicalista
El anarcosindicalismo no propone una tesis anarquista nueva, sino que, principalmente, aboga por el anarquismo colectivista o comunista. El anarcosindicalismo como tal es nada más una forma de llegar a la anarquía, un movimiento de trabajadores. Una sociedad no puede ser anarcosindicalista, sino que con la llegada del anarquismo, el anarcosindicalismo desaparece por completo. El anarcosindicalismo no propone que haya una sociedad anarquista basada en sindicatos, pues eso se puede ver en el anarquismo colectivista o comunista.
El anarcosindicalismo nada más propone una idea de llegar a la anarquía: a través de sindicatos. Y estos sindicatos son también responsables de manifestaciones y revoluciones. Un ejemplo muy básico es el anarcosindicalismo Español que se vivió en 1936. La Cataluña revolucionaria de ese entonces era anarcosindicalista, gracias a sindicatos como la CNT-FAI y otros que no eran necesariamente anarquistas pero participaron. Cuando se llegó a la anarquía de tan solo un verano, la CNT-FAI nada más era una unión de sindicatos muy bien vista dentro de una sociedad anarquista colectivista.
Anarcofeminismo
El anarcofeminismo (o anarcafeminismo) se basa en el feminismo que insinúa que, para lograr la igualdad entre el hombre y la mujer, se debe abolir primero el Estado y toda autoridad. También critican la familia, educación, sexualidad y el género, ya que son conceptos que pueden llevar a la supremacía de un género u otro, especialmente del hombre.
Anarquismo ecológico
El anarquismo ecológico se basa en la priorización del medio ambiente dentro de una sociedad anarquista. Se aboga por una sociedad autosuficiente integrada en el medio ambiente que evita el avance industrial. Muchos de estos anarquistas ecológicos suelen verse y ser primitivistas, sin embargo, no todos lo son.
Anarquismo insurreccionalista
Al igual que el anarcosindicalismo, el anarquismo insurrecionalista es un movimiento que trata de llegar a la anarquía. En este caso, ellos no usan sindicatos ni atacan al sistema desde dentro, sino que atacan desde fuera. Muchos ejemplos de anarquismo insurrecionalista son aquellos que destrozan la propiedad pública y rural, como en Exarchia pasa constantemente en cuanto aparece alguna fuerza autoritaria por el barrio griego.
Anarquismo post-izquierda
Los anarquistas post-izquierda son críticos con el anarquismo y su relación con la izquierda política y también critican la organización con la izquierda política. En general, son anarquistas que critican los principios anarquistas.
«Anarcocapitalismo» o libertarios de derecha
Si de verdad creías que el anarquismo era nada más orientado hacia la
izquierda política, estás totalmente equivocado. Hace no muchos años atrás se alzaron movimientos y personas denominándose «anarcocapitalistas«. Este término es, sin embargo, erróneo, puesto que el anarquismo es anticapitalista y siempre lo ha sido, desde que se teorizó hasta hoy en día. Por lo que, llamar a este tipo de personas «anarcocapitalistas» es totalmente erróneo. Si se tuviera que llamar a estos movimientos de alguna manera, sería «libertarios de derecha». Puedes estar de acuerdo o no en el nuevo esquema político que se divide en libertario/autoritario e izquierda/derecha y usar simplemente el «izquierda o derecha», pero lo cierto es que es más concreto el nuevo esquema político. Puesto que el «izquierda o derecha» nada más clasifica las ideologías según la economía que propone, estando en este caso los socialistas a la izquierda y los capitalistas a la derecha, pero en este caso, dónde iría el anarquismo? No puede estar en izquierda, puesto que, como estáis observando, ofrece muchas perspectivas y tesis distintas. Por lo que el esquema político más correcto y concreto de usar es el de libertario/autoritario e izquierda/derecha.
Y explico esto precisamente porque los tan autodenominados «anarcocapitalistas» no son anarquistas, sino libertarios. La palabra libertario hace referencia a tanto libertarios de derecha como de izquierda: anarquistas o «anarcocapitalistas«.
Los libertarios de derecha creen en una sociedad donde predomina el capitalismo bajo una sociedad anarquista. Dejando de lado la incoherencia que esto tiene, puesto que las empresas y corporaciones no tienen control alguno y eso supondría poder -por lo que muy libertario no sería, sino que sería una distopía gobernada por grandes corporaciones, es decir, un liberalismo muy extremo- y llevaría, como dicho anteriormente, a una distopía gobernada por grandes corporaciones sin control alguno.
Anarquismo sin adjetivos
Un anarquista sin adjetivos piensa que se puede vivir en una sociedad anarquista -anticapitalista- donde convive todo tipo de escuelas anarquistas, desde mutualistas hasta colectivistas.
Anarquismo tecnológico
El anarquismo tecnológico propone una «anarquía tecnológica» donde las características más fundamentales son el código abierto, el anonimato y la privacidad. Se puede decir que es uno de los «movimientos» o «escuelas» más defendidas dentro de Internet. Dentro del anarquismo tecnológico existe el criptoanarquismo, el cual propone redes anónimas y dinero electrónico (como BitCoins).
Anarquismo nihilista
El nihilismo es, posiblemente, la filosofía anti-filosófica más destructiva y enemiga del propio anarquismo. Hay algo que tienen en común los anarquistas y los nihilistas: ambos son antiautoritarios. Sin embargo, el anarquismo es antiautoritario porque cree en una sociedad que se puede valer por sí misma sin depender de alguien, que además, abusa de tus derechos. El nihilismo es antiautoritario porque el nihilismo es amoral y la autoridad es moralista.
El problema que ven los anarquistas en el nihilismo no es el nihilismo existencial (la vida no tiene sentido o significado alguno, los acontecimientos son totalmente aleatorios, no existe ningún Dios o fuerza sobrenatural, etcétera), sino que el problema lo ven en el nihilismo moral (nada importa, la moral no es objetiva, y como mucho, puede ser subjetiva). El nihilismo moral puede llevar al caos, sobretodo si lo juntas con el nihilismo existencial, lo cual lleva al rechazo del nihilismo por parte del anarquismo. Sin embargo, no todos los anarquistas lo rechazan, y no todos los nihilistas rechazan el anarquismo. Como dijo Renzo Novatore, «Soy un individualista porque soy un anarquista; y soy un anarquista porque soy un nihilista.»
Aquellos que dicen que la anarquía es caos, jamás conocieron el anarquismo nihilista, abogando por la destrucción del orden y la moral para llegar a la verdadera libertad. Cabe indicar, de igual modo, que Max Stirner era nihilista, o al menos lo daba a entender en sus escritos.
Hay muchas más escuelas anarquistas, y relacionadas con el anarquismo, sobretodo fusiones de otras ideologías, como el anarquismo marxista. Sin embargo, estos no son tan relevantes o no tienen nada especial, no es necesario explicar qué es el anarquismo marxista, puesto que con explicar qué es el anarquismo y qué es el marxismo y juntarlos, ya obtienes la respuesta.